Ruido innecesario de Nikon sobre fondo de imagen innecesaria de otro maniquí dentro de su escaparate Madrid - Abril 2007 (El día que buscabas HDR y lo buscabas a pulso)
6
comments:
Anónimo
dijo...
La verdad es que te ha metido muchísimo ruido sí, pero me parece muy interesante el reflejo de la fachada de enfrente en el cristal.
No es por la foto, es por el conjunto. (Siempre lo haces! un comentario apropiado o un titulo especial convierten una foto vulgar en una pequeña joya).
Hace poco fuí a un taller de Oscar Molina, sobre la creación de proyectos personales de fotografía, y a todos estos obstáculos les llamaba "distractores".Te roban tiempo y creación continuamente...pero veo que dan para una foto en el blog un manubeso
Sí. Distractores. Pero bueno. Dicen también que es imposible eliminarlos. Unos son muy molestos, otros menos, pero sin ellos perdemos el norte. No sabemos hacia dónde tirar. Dicen.
6 comments:
La verdad es que te ha metido muchísimo ruido sí, pero me parece muy interesante el reflejo de la fachada de enfrente en el cristal.
Creo que te plagiaré la idea en el futuro.
http://www.flickr.com/photos/leicca/384768016/
Ahí hay otra, de una serie de ocho escaneos de negativos (!)
http://bleicca.blogspot.com/2007/02/ocho-de-un-bal.html
Entre tú y yo, plagia mejor a los grandes. Y repite sus fotos de reflejos de París, Londres, NY... :D
Gracias por venir y comentar.
Siempre me asombras, niña! Eres una fiera!
No es por la foto, es por el conjunto. (Siempre lo haces! un comentario apropiado o un titulo especial convierten una foto vulgar en una pequeña joya).
Felicidades!
Antonio
gracias, guapete. supongo que hay que comentarlo todo. :)
Hace poco fuí a un taller de Oscar Molina, sobre la creación de proyectos personales de fotografía, y a todos estos obstáculos les llamaba "distractores".Te roban tiempo y creación continuamente...pero veo que dan para una foto en el blog
un manubeso
Sí. Distractores. Pero bueno. Dicen también que es imposible eliminarlos. Unos son muy molestos, otros menos, pero sin ellos perdemos el norte. No sabemos hacia dónde tirar. Dicen.
Gracias por venir, Manuel.
Deja un comentario