Deposite aquí su Experiencia Estética
Pere Ordóñez, Feria del Libro, Madrid, julio de 1994
Antaño los escritores de España (y de Hispanoamérica) entraban en el ruedo público para transgredirlo, para reformarlo, para quemarlo, para revolucionarlo. Los escritores de España (y de Hispanoamérica) procedían generalmente de familias acomodadas, familias asentadas o de una cierta posición, y al tomar ellos la pluma se volvían o se revolvían contra esa posición: escribir era renunciar, era renegar, a veces era suicidarse. Era ir contra la familia. Hoy los escritores de España (y de Hispanoamérica) proceden en número cada vez más alarmante de familias de clase baja, del proletariado y del lumpenproletariado, y su ejercicio más usual de la escritura es una forma de escalar posiciones en la pirámide social, una forma de asentarse cuidándose mucho de no transgredir nada. No digo que no sean cultos. Son tan cultos como los de antes. O casi. No digo que no sean trabajadores. ¡Son mucho más trabajadores que los de antes! Pero son, también, mucho más vulgares. Y se comportan como empresarios o como gángsters. Y no reniegan de nada o sólo reniegan de lo que se puede renegar y se cuidan mucho de no crearse enemigos o de escoger a éstos entre los más inermes. No se suicidan por una idea sino por locura y rabia. Las puertas, implacablemente, se les abren de par en par. Y así la literatura va como va. Todo lo que empieza como comedia acaba indefectiblemente como comedia.
Roberto Bolaño
Los detectives salvajes, Anagrama, pág. 485
(Nota: Pere Ordóñez se basa en Pere Gimferrer)
Los detectives salvajes, Anagrama, pág. 485
(Nota: Pere Ordóñez se basa en Pere Gimferrer)
Estaba releyendo al genio Bolaño. En esta entrada no hay fotos
En la siguiente. (A ver.)
Yo no conozco mucho mundo.
Yo nací muy tarde, cuando había pasado ya todo. No sé cómo le va a la literatura. O a la filosofía. La educacion pública. La fotografía.
Empresarios y gángsters.
No lo sé.
No sé si se suicidarían por una idea. Tampoco sé si reniegan sólo de lo que se puede renegar ni si escogen enemigos inermes. Igual apuestan por algo más que escalar mirándose el ombligo.
Yo nací ayer y no me entero bien. Nací algo sorda.
Tampoco sé lo que es un empresario.
A lo mejor los empresarios no existen.
Ni los gángsters.
Ya te digo que yo no tengo mucho mundo.
En la siguiente. (A ver.)
Yo no conozco mucho mundo.
Yo nací muy tarde, cuando había pasado ya todo. No sé cómo le va a la literatura. O a la filosofía. La educacion pública. La fotografía.
Empresarios y gángsters.
No lo sé.
No sé si se suicidarían por una idea. Tampoco sé si reniegan sólo de lo que se puede renegar ni si escogen enemigos inermes. Igual apuestan por algo más que escalar mirándose el ombligo.
Yo nací ayer y no me entero bien. Nací algo sorda.
Tampoco sé lo que es un empresario.
A lo mejor los empresarios no existen.
Ni los gángsters.
Ya te digo que yo no tengo mucho mundo.
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